El entorno actual es volátil, complejo, ambiguo e incierto; vivimos en un mundo VUCA donde alcanzar y mantener el éxito en las organizaciones modernas requiere de talentos imposibles de encontrar en un solo individuo, de ahí que los equipos se constituyen como una forma de trabajo indispensable. ¡Liderazgo de Equipos e Inteligencia Social!

Nadie es una isla. Formamos parte de sistemas, sencillos y complejos, como familias, empresas, organizaciones, comunidades, asociaciones, partidos, clubs deportivos… y un largo etcétera.

Formamos multitud de relaciones que tal vez no tengan apariencia de equipo y sin embargo lo sean. Conscientes o no, nos encontramos inmersos en una red de relaciones que constantemente nos afecta y a veces nos infecta. Los sistemas son como una tela de araña, donde la caricia de un solo hilo afecta a toda su estructura.

Colaborar no es “hacerle el trabajo al otro”. La colaboración no resta responsabilidad a los individuos, más bien, la hace fácilmente abordable. La acción y resultado depende de todos y en la que todos están comprometidos. Cumplir con el rol que asumimos significa compartir la responsabilidad.

¿Qué entendemos por equipo de trabajo?

Un equipo es un grupo de personas que trabajan juntas en una propuesta común. Comparten percepciones y procedimientos de trabajo, cooperan, aceptan un compromiso y resuelven sus desacuerdos en discusiones abiertas. Todo ello no aparece automáticamente, debe construirse poco a poco.

¿Qué beneficios supone el trabajar en equipo?

Desde el punto de vista pedagógico, la colaboración facilita el aprendizaje, permite analizar problemas comunes, con mayores y mejores perspectivas. Exige criterios, planteamientos y principios de actuaciones comunes y coherentes. Mejora el auto concepto, la autoestima, el sentimiento de propiedad y pertenencia. Genera una atmósfera proactiva que anima y facilita el trabajo. Requisitos que no son posibles sin coordinación, colaboración y trabajo en equipo. 

• Un equipo es un sistema unido por y para un objetivo
• Conocer talentos, fortalezas y debilidades es clave
• Un equipo busca soluciones y encuentra oportunidades
• La inteligencia social aporta visión global y múltiples perspectivas para trabajar de dentro hacia fuera

Lograr equipos de alto rendimiento requiere hacer a sus miembros conscientes y consecuentes de sus capacidades, de su poder, de su liderazgo, para que den respuesta, desde dentro, en su día a día, a sus necesidades. Para que sean su mejor versión y logren juntos sus objetivos.

Nadie es una isla, todos estamos en relación y la calidad de esas relaciones es esencial para nuestro bienestar personal y desarrollo profesional.

Todo esto y algo más compartimos en la jornada del pasado 23 de febrero en la jornada:

LIDERAZGO DE EQUIPOS.
INTELIGENCIA SOCIAL EN LAS EMPRESAS

“Yo hago lo que tú no puedes, y tú haces lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas”
Madre Teresa de Calcuta

¡Que tengas un día excelente!

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